Diario metafísico de un filólogo en apuros

  Convivo con el astigmatismo (y de un tiempo a esta parte, con su colega la "vista cansada") desde hace la “vida entera” y, siendo muy de contar, cuento siempre la historia de la elección de mis primeras gafas que, por total convencimiento, tenían, estaba  MUY claro , que ser redondas .   David (astigmático novato): Sí, redondas. Las quiero redondas. Óptica: ¿redondas? No te lo aconsejo para nada. Tú lo que necesitas es un modelo que te tape lo más posible la cara. (😖😖) David (astigmático novato y .. resentido): ah…pues muchas gracias…. Óptica: ¡¡¡¡no, no….quería decir…!!!!! Y redondas , ¡cuán voluble es la voluntad cuando uno es joven!,…. NO fuero n 😢😢 ….porque estaba claro que como mejor iba a estar era….con la cara tapada y porque, de aquel momento tan surrealista en el que la pobre óptica trataba de aconsejarme el tipo de montura que, por mi corte de cara, me iba (milagros a Lourdes..) a "favorecer" más, aprendí que ser honesto con el Cl

  31 de Julio 2004, aeropuerto de Heathrow. David, súper niñera de pro, muerto , “morido” , “matao” , despide (que encuentren tanta paz como la que dejan) al grupo principal de no menos de 40 pre-adolescentes que, hormonas en ristre, regresan a España con el resto de monitores tras 4 semanas de clases, excursiones, boleras, mini golfs, barbacoas en la playa, discotecas más o menos light y altibajos emocionales de todos los colores. 😵 ¿Por delante? … más de lo mismo 😔  … a María y Juan (nombres ficticios) hijos de mega empresario poderoso y, para colmo, íntimo del jefe, les quedan todavía 15 días de curso y ¡oye!, ¿quién mejor que David, joven, dinámico y prometedor 😎 (¡ prometo que nunca jamás me vuelvo a encargar de un grupo de estos!) para supervisar el “correcto funcionamiento de su programa”? Pero no dramaticemos , 2 semanas con, simplemente 2 alumnos, cuando se han pasado las 4 anteriores resolviendo los entuertos varios de otros 40 (📞 ring ring . David, ¡corre que un

  Asocio a Richy con una época irrepetible . De partidos, desplazamientos, contra ataques al límite, lanzamientos, fintas “vertiginosas”, entrenamientos nocturnos después del trabajo y de todas las ganas del mundo de que llegase el finde para quitarme el " disfraz de proveedor " y vestirme de lo que casi siempre quise ser realmente: jugador de balonmano . Jugar jugué, y mucho , pero no lo suficientemente bien como para que lo del "cambio de ropa" fuera permanente así que, durante más de 30 años, me conformé con lo que tocaba y esperé hasta que hace como 4, mi rodilla (la de siempre) gritó, otra vez, “hasta aquí” en aquel partido en Leganés y hasta que, después, la cabeza dijo ¿para qué más si "cojo" eres, incluso 😂, peor? ¿ Echarlo de menos ? Muchísimo , y últimamente aún más, así que cuando hace unos meses, 23.15 y “to´ tirao” en el sofá después de un día de esos "fenomenales" en la oficina, Richy, atracador whatsappero , me escribía "