"TESTANDO" QUE ES GERUNDIO.

 

Reconozco que me gusta hacer pruebas de nivel.

 

   Imagen sacada de toonpool.com

 

Bien es verdad que cuando, como ahora, toca hacer 500000 del tirón y además hacerlas en un periodo cortito de tiempo,  acaba uno “pelín tocadete” pero las pruebas sirven, aparte de para, obviamente, medir conocimientos de partida y consecuentemente, transmitirnos información que nos permitirá organizar grupos ateniéndonos a criterios de homogeneidad, para otras muchas cosas.

El proceso de pruebas es, bajo mi punto de vista, una de las primeras tarjetas de presentación de una Consultora de Idiomas.

La velocidad y habilidad con que las gestiones dará a Formación/RRHH una pista de mucho o lo poco que se van a tener que pelear contigo en el día a día y a la hora de confeccionar informes, preparar partes de asistencia y hacer un seguimiento efectivo de los diferentes cursos.

En lo que respecta al alumn@, las pruebas son, en la mayoría de los casos, una toma de contacto inicial con tu forma de trabajar y la oportunidad de que identifiquen a la persona/s que les van a “cuidar” durante el curso. Aquella/s a las que pueden recurrir cuando tengan algún comentario y “regañar” si algo no les gusta.

Me choca mucho cuando hablando, en general, con “amigos y conocidos varios” comentan que, en la gran mayoría de los casos, no tienen ni idea del nombre de la escuela que se encarga de su formación y en la práctica totalidad, que ignoran el nombre de la persona que estás detrás de la gestión directa de su curso. Las pruebas y, lógicamente, el seguimiento posterior, sirven para evitar situaciones como éstas que, como digo, se me hacen extrañas.

Por otra parte, hacer pruebas es el origen de un número inagotable de anécdotas, y al mismo tiempo, una posible fuente de información que se puede utilizar para el provecho del  Cliente (información que posteriormente puede ser muy útil a la hora de planificar contenidos o incluso orientarle sobre la mejor manera de enfocar su plan de formación).

En definitiva:  doy por bien empleado el tiempo y el "mareillo" de "testar y testar" porque, de largo, suponen muchos más beneficios que desventajas.

 Cuanto más sepamos sobre los alumn@s y sus expectativas desde un primer momento, más elementos tendremos para adaptarnos a sus necesidades.